A medida que avanzan las generaciones la esperanza de vida aumenta progresivamente. Hace poco más de un siglo una persona con sesenta años tenía poco recorrido vital, pero hoy en día todavía se encuentra prácticamente en la flor de la vida. Es por eso que esta etapa de madurez debe vivirse lo más plenamente posible.
En la actualidad tenemos a nuestro alcance infinidad de maneras de mantener ocupado nuestro tiempo. Esta nueva época, por ejemplo, puede ser una buena ocasión para retomar nuestras aficiones de juventud, como el baile o la pintura, pero existen una infinidad de actividades que nos harán disfrutar como un niño.
Para ello los expertos recomiendan planificarse, marcarse unos objetivos claros y así crear expectativas para llegar con más ilusión a esta nueva etapa. Pensar en lo que está por venir y lo que nos aportará la nueva década nos ayudará a sentirnos bien por dentro y por fuera. Aquí van algunas ideas:
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- ¡A ponerse en forma!: El deporte nos ayudará a estar en forma para hacernos mayores de la mejor forma posible, pero además nos lo pasaremos bien. Hoy en día las personas jubiladas son las que más afición tienen por el gimnasio. Es por eso que las clases con más participantes son aquellas pensadas para los seniors: el aquagym, el spinning, zumba y el body combat. “Se trata de clases muy entretenidas que tienen la música como hilo conductor y los resultados de su práctica se notan rápidamente”, explica Robert Herráez, codirector de fitness de la cadena de gimnasios DiR.
- ¿Por qué no conocer nuevos destinos?: Visitar ciudades y lugares soñados es una de las mejores medicinas para la mente y el cuerpo. Tal y como señalan los últimos datos del IMSERSO, más de 900.000 personas disfrutan de vacaciones gracias al programa estatal, por lo que se trata de una de las actividades con más éxito.
- Nunca es tarde para seguir aprendiendo: Dedicar nuestro tiempo a ampliar los conocimientos sobre temas que nos interesen puede ser otra de las maneras para mantenernos activos. Apostar por la formación estimula la actividad cognitiva y nos ayuda a entender mejor a las generaciones más jóvenes. En España cada vez hay más universidades que ofrecen cursos para alumnos mayores de 50 años, y el éxito es considerable: “A partir de los 50 ves la vida no por lo que ya ha pasado, sino por lo que queda, y piensas que el tiempo se tiene que aprovechar”, argumenta Margarita González, coordinadora de la Universitat de la Gent Gran de Cornellà.
- Activa tu mente gracias al mundo 2.0: Cada vez son más las personas adultas que pierden el miedo a Internet. De hecho, el margen de crecimiento de su uso es cada vez mayor entre las personas mayores de 45 años que entre la juventud. Más allá de entretenernos y divertirnos, su uso puede ayudarnos a activar zonas inactivas del cerebro y a combatir las pérdidas de memoria. ¿El mejor consejo? Tener paciencia e ir con calma. Dolors Solano, coordinadora de Seniorlab, manifiesta: “Es muy necesario ir tranquilamente porque no estamos acostumbrados a darnos tiempo para aprender, pensamos que todo lo que está vinculado al mundo digital tiene que hacerse deprisa y corriendo, que pulsaremos un botón y listo. No; una de las cosas más importantes es no tener prisa y, por encima de todo, pasárselo bien”.
- Aporta tu granito de arena: El psicólogo Rafael Santandreu explica que activar la colaboración es otra de las claves. Encontrar personas que vivan nuestra misma situación y que estén dispuestas a colaborar con los demás puede darnos una nueva visión de nuestra realidad. Voluntariado, o cuidar a algún familiar completan el listado con algunos planes para aprovechar el nuevo tiempo que nos brinda la jubilación.
Tal y como decía Ramón y Cajal, “en la vejez no nos deben preocupar las arrugas del rostro, sino las del cerebro”. Vivamos esta nueva etapa con la mayor plenitud posible, tenemos a nuestra disposición infinitas posibilidades para seguir disfrutando del día a día.
