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Son tiempos diferentes, extraños, nuevos, complicados… Pero eso no significa que vayan a ser tiempos malos. ¡Vamos a ser creativos y sostenibles! Siempre tenemos la opción de ver la parte positiva a las cosas, de sacar tiempo para hacer todo aquello que siempre nos quejábamos de no tener tiempo. Cada uno tenemos nuestras prioridades, nuestros gustos, hobbies y aficiones. Yo vengo a proponer algo que a su vez es creativo, divertido y eco-friendly.
Reutilizar y la segunda vida de las cosas
Pensad en la cantidad de productos desechables que compramos, champús, papel de váter, latas de conserva, botes de cristal, cajas… Y vayamos más allá, la cantidad de cosas que compramos y al quedar anticuadas o viejas tiramos. ¿Y si le damos un vuelco y las convertimos en algo nuevo? No solo pasaremos un buen rato creando cositas bonitas sino que si todo el mundo hiciera este pequeño gesto el impacto en la naturaleza sería brutal. La cantidad de basura no reciclable que tiramos acaba en nuestros océanos y en nuestra tierra. Pongamos remedio al asunto y vamos allá con algunas ideas!
Cartón de papel de váter
Todos llenamos nuestra basura a lo largo del mes de estos típicos cilindros de cartón, como si no tuvieran ningún valor, pero este valioso cartón viene de nuestros árboles y gracias a ellos respiramos. Así que sí, ¡ese cartoncito puede servirnos más de lo que creemos!
Hazte con una caja que tengas por casa, quizá una caja de zapatos, o de alguna compra que hayas hecho. Llénala de cartones de papel de váter colocados en vertical, es fácil y sencillo. Enrolla todos tus cargadores, cables pequeños y similares y pon cada uno en un cilindro. ¡Estupendo! Tus cables ordenados y siempre localizados por primera vez en la vida.
Hueveras
Una vez más un valioso cartón al que no hacemos mucho caso. Si lo llenamos de tierra y enterramos algunas semillas puedes crear tu primer semillero. pues utilizar las semillas que tiras todos los días a la basura, como las de los pimientos, la manzana, o incluso semillas comestibles que tengas por casa, sésamo, chía, lino, etc.
¿Te atreves a experimentar con los semilleros y hacer brotar la vida? Una vez te hayan nacido los primeros brotes puedes trasplantarlos en latas de conserva que vayas guardando a partir de ahora. Y voilà, otro buen uso a las típicas latas que tanto nos ocupan en la basura y nuestros armarios.
Coloca tus alimentos en botes de cristal
Un gran cambio que marca la diferencia cuando hablamos de sostenibilidad es dejar de comprar pláticas. O reducirlos al máximo. ¿Os preguntaréis cómo? Pues muy fácil. Empezad a comprar todo lo que son cereales, pastas, semillas y frutos secos en una granería que tengáis cerca de casa, probablemente no las conozcáis o hayáis pasado por delante mil veces sin fijaros en ella.
Os aseguro que la experiencia de comprar en una granería supera con creces a ir al supermercado. Puedes ver los productos, olerlos, apreciar sus texturas y comprar cosas de más calidad incluso orgánicas a mejor precio. Puedes meterlas en bolsitas de tela o papel (plástico no por favor) y al llegar a casa colocarlo todo en tarritos de cristal que hayas guardado de tus compras. Potes de tomate, cremas de verduras, lentejas, garbanzos… A todos esos botes de cristal puedes darle un segundo uso. Hay gente que va con los mismos tarros a la granería. A mí me cambio la vida descubrir este nuevo modo de comprar.
Botes de cristal
Otra gran idea para los botes de cristal es sacar su etiqueta y usarlo de porta velas, si eres creativo y pintas un poco con figuras o formas el tarro al poner la vela tendrás reflejos maravillosos de la luz de la vela en tus paredes. ¿Por qué no pasar una tarde creativa escuchando buena música o con tu pareja o hijos haciendo un poco de DIY? ¡Anímate!
Botellas de detergente y champú
No te deshagas de ellas, guarda las botellas porque no tendrás que comprarlas nunca más. ¿Sabías que en muchas granerias y otras tiendas ecológicas venden a granel estos productos? Sí, como lo oyes. Puedes ir con tu botella vacía y rellenarla de jabón para el cuerpo, para el pelo, detergente para el lavavajillas y la lavadora, etc. ¿Os imagináis la cantidad de plástico que reduciríamos si todos optáramos por esta opción?
Botellas de vino
¿A quién no le gusta una lámpara original? Si rellenas una botella de vino con lucecitas de navidad (Si son de las cortitas que van con pilas mejor) crearás una lámpara portátil maravillosa, cálida y mágica. La luz que hacen estas bombillas en los cristales de diferentes tonos de las botellas de vino es preciosa.
Aprovecha tu ropa vieja
Las pieles de algunos alimentos como la cebolla, la remolacha, la col lombarda… ¿Sabíais que podéis usarlas como tintes para ropa natural? Me encanta jugar con la ropa, customizarla, cortarla, teñirla… Pero la mejor parte es hacerlo con alimentos que tengamos en casa. Sólo hay que hervirlos en agua, colar los restos de alimentos y con el agua teñida sumergir nuestras prendas y dejarlas unas cuatro horas. Alucinaréis especialmente con el café, las pieles de cebolla y la remolacha. Dejad volar vuestra imaginación. Si preferís las típicas camisetas hippies, sólo tenéis que enrollar la camiseta atarla con gomas y rociarla con el “tinte natural” por zonas. Tras unas horas desenrollarla y disfrutad con el resultado.
Todo esto y mucho más podemos hacer estos días desde casa. ¿Te animas a probar?