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Seguro que ya has oído hablar de las zonas azules, esos lugares del mundo donde vive la gente más longeva del planeta. Se trata de espacios en los que la esperanza de vida supera los cien años y, además, sus habitantes lo hacen en muy buenas condiciones. Como es lógico, estas zonas del mundo despiertan gran interés y mucha gente se pregunta cuál es su secreto y qué tienen en común estos lugares tan aparentemente distintos y separados por kilómetros de distancia.
Está claro que la esperanza de vida varía mucho de un país a otro, y depende de muchos factores. Su clima, sus niveles de contaminación, su gastronomía, su ritmo de vida… En este post vamos a descubrir qué hace que estos lugares sean los más longevos del mundo y lo que tenemos que aprender para que la esperanza de vida en España vaya en aumento, así que… ¡no te lo pierdas!
Zonas azules: ¿qué son?
En concreto, las zonas azules en el planeta son cinco. Cinco regiones en las que la esperanza de vida es muy superior a la del resto del mundo. En estos lugares, las personas de 80, 90, 100 e incluso 110 años son una parte muy importante de toda la población y envejecen con un buen estado de salud.
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Pero la alta esperanza de vida no es la única ventaja de las zonas azules. Además, sus habitantes padecen menos enfermedades coronarias, cáncer o demencia senil, lo que a su vez favorece que la gente viva durante más tiempo y con una mayor calidad de vida.
A principios de siglo, el astrofísico Michel Poulain y el gerontólogo Gianni Pes hicieron un estudio demográfico para descubrir en qué regiones había más habitantes que superaran los cien años. En un plano abierto, comenzaron a pintar de azul los pueblos que cumplieran este requisito. Así nació la primera zona azul del planeta, Barbagia, una región en el centro de la isla de Cerdeña, en la que una de cada 196 personas nacidas entre 1880 y 1890 había cumplido los cien años.
El término fue acuñado ya de manera oficial en 2005 por Dan Buettner en la revista National Geographic. El investigador continuó con el estudio de las zonas azules y descubrió cuatro lugares más en el mundo en los que la esperanza de vida destacaba entre las de los demás. Así, Icaria, en Grecia; Loma Linda, en California; Nicoya, en Costa Rica, y Okinawa, en Japón, se sumaron a la región italiana en la lista de zonas azules. Vamos a repasar cada uno de estos lugares para descubrir qué los hace tan especiales.
Barbagia, Cerdeña
En esta región de la isla italiana, muchos han trabajado de pastores o granjeros, y esa costumbre activa de caminar a diario varios kilómetros se ha mantenido, lo que favorece el buen funcionamiento de las articulaciones y del sistema cardiovascular.
Por supuesto, la famosa dieta mediterránea juega un papel fundamental en la buena salud de los lugareños. Queso de cabra, pan, sardinas, vino, mucha verdura y poca carne son las bases de la alimentación en Barbagia. Productos de la tierra y de temporada, pocas grasas y una buena cantidad de productos vegetales.
Además, los mayores son una parte fundamental de la vida de la región italiana. Contribuyen a la sociedad transmitiendo sus tradiciones más antiguas, sus valores y preservando la historia, lo que hace que se mantengan activos también mentalmente.
Icaria, Grecia
Otra zona azul que avala la calidad de la alimentación mediterránea, Icaria, destaca por sus bajos niveles de mortalidad. Su dieta, basada en aceite de oliva, patatas, muchas legumbres, frutas y miel, es una de las más sanas del mundo.
Aun así, tienen otro secreto, y es que consumen a diario una copa de vino y varias tazas de café. El vino tiene beneficios contra el estrés y enfermedades de las arterias. Por su parte, el café es antioxidante y protege el corazón y el hígado. Por supuesto, las ventajas de estas bebidas se disfrutan si se consumen con moderación.
En esta isla paradisíaca, uno de cada tres habitantes llega a los 90 años y suelen vivir 10 años más que el resto de europeos. El estilo de vida pausado y tranquilo permite a los lugareños desplazarse a todas partes andando y descansar más y mejor, dos bases de la longevidad.
Loma Linda, California
Esta zona azul tiene una historia peculiar detrás. En Loma Linda vive una gran comunidad de seguidores de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, que creen que el cuerpo humano es el templo en el que habita el Espíritu Santo.
Llevan una dieta estricta pero muy saludable, que se parece bastante a la alimentación vegana. Consumen sobre todo productos no refinados, como frutos secos, cereales, legumbres y soja. No consumen prácticamente productos de origen animal ni alcohol y no fuman.
Su caso es sorprendente, ya que la mayoría de zonas azules son islas o penínsulas; sin embargo, Loma Linda es un pueblo de California. Suelen vivir diez años más que el resto de sus vecinos estadounidenses y tienen los índices más bajos de enfermedades cardiovasculares del país.
Nicoya, Costa Rica
“Las tres hermanas” son la clave de la alimentación en Nicoya: frijoles, maíz y calabaza. Los lugareños comen a diario alimentos antioxidantes, fibra y calcio procedentes de vegetales.
Hacen ejercicio físico de baja intensidad, consumen muchas frutas tropicales y viven en una comunidad muy unida y optimista, por lo que mantienen una vida social activa. Todos estos factores hacen que estos costarricenses lleguen a los 90 años en pleno estado de salud en mucha mayor medida que sus vecinos de Estados Unidos.
Okinawa, Japón
En esta isla japonesa, los habitantes se guían por el ikigai, que implica tener un propósito de vida claro. Los mayores de 65 años, en Okinawa, viven más que en cualquier otra parte del mundo gracias, entre otros, a los bajos niveles de estrés, de riesgo de cardiopatías y de demencia.
Los mayores llevan un estilo de vida activo, haciendo ejercicio a diario y conservando sus relaciones personales durante toda la vida.
Como en las demás zonas azules, la alimentación es esencial para alargar la esperanza de vida, y estos japoneses consumen a diario imo, una clase de boniato morado, tofu, cúrcuma, té verde y algas.
¿Cuál es la esperanza de vida en España?
Aunque (todavía) no tenemos ninguna zona azul en nuestro país, también podemos presumir de ser un lugar en el que vivimos mucho y muy bien. La esperanza de vida en España es la más alta de toda Europa y la tercera del mundo, por detrás de Japón y Suiza.
La esperanza de vida en España está en los 83 años, 80 en el caso de los hombres y 86 en el de las mujeres. Sin duda, la dieta mediterránea, una de las más saludables del mundo, la calidad de nuestro sistema sanitario y nuestro estilo de vida activo y social son las claves de esta ventaja.
Las zonas azules: conclusiones
Entonces, ¿qué tienen en común estas partes del mundo? ¿Por qué son las más longevas del planeta? Está claro que los habitantes de las zonas azules disfrutan de una calidad de vida muy superior por diferentes razones. Sus saludables dietas, basadas en los vegetales y las legumbres, la actividad física a diario, los bajos niveles de estrés, el contacto con la naturaleza y el sentimiento de pertenencia a una comunidad son los secretos de la longevidad de las zonas azules.
Y es que tenemos mucho que aprender de estos lugares del mundo tan peculiares. La esperanza de vida en España y en el resto del mundo podría aumentar una media de 10 años si imitásemos el estilo de vida de las zonas azules.