Tabla de contenidos
El gas natural ha pasado a convertirse en una de las fuentes de energía más usadas en España, por detrás de la electricidad. Cocinas, agua y calefacción son los tres recursos en los que se destina esa energía.
Ahora que comienzan a bajar las temperaturas, el consumo de gas hace todo lo contrario. La calefacción de los hogares comienza a activarse y el consumo de gas se dispara. El gas natural es una fuente de energía no renovable, por ello te contamos cómo llegar a un consumo sostenible y responsable. ¿Estás listo para descubrir trucos para ahorrar gas natural en tu calefacción? ¡Sigue leyendo!
Ahorrar en calefacción de gas natural: trucos
¿Sabías que el mayor consumo de gas natural se produce en invierno y es a través de la calefacción? Ahora que se acerca el frío, seguro que te interesa saber cómo calentar la casa de una forma económica y sostenible.
¿Quieres protegerte a ti y a los que más quieres? ¡Descubre los beneficios de un seguro de vida!
Hemos preparado una serie de consejos para que consigas reducir tu consumo de gas natural de forma sencilla. Si llevas a cabo estos pequeños cambios de hábitos y trucos, no solo conseguirás un consumo más responsable y ecológico para el planeta, además reducirás tu factura de gas.
Tu caldera y el ahorro de gas van de la mano
El estado de nuestra caldera puede estar provocando un consumo ineficiente de gas natural. Puede que haya llegado la hora de decir adiós a tu caldera actual y optar por una caldera de condensación de gas natural. Estas calderas cuentan con un sistema de recuperación de la energía proveniente de la condensación.
Con este modelo de caldera podrás ahorrar hasta un 30% de gas natural respecto a otros.
Calcula el precio de tu seguro
Termostatos por zonas de tu casa
Instalar termostatos digitales por las diferentes zonas de tu hogar te permitirá ahorrar considerablemente en gas natural. Estos dispositivos te permitirán programar las horas en las que quieres que se active la calefacción.
Con esta instalación podrás encender la calefacción por zonas, dejando inactivos los radiadores de las estancias de las que no haces uso. Además, ¿para qué mantener toda la vivienda caldeada durante todo el día si no vamos a estar en casa?. Podrás encenderla a la hora que necesites, por lo que experimentarás un gran ahorro en tu factura de gas.
La temperatura adecuada existe
Seguro que has estado en más de un establecimiento en el que la temperatura del aire acondicionado es similar a la del Polo Norte o bien en el que la calefacción está al nivel del Sahara a plena luz del día. Lo mismo pasa en algunos hogares.
La clave está en el equilibrio: ni tanto ni tan poco. Existe la temperatura perfecta con la que sentirnos confortables y además, ahorrar en gas natural. ¿Sabías que por cada grado extra el consumo incrementa un 7%?
Desde el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), encargados de la divulgación sobre la eficiencia energética, recomiendan que establezcamos las siguientes temperaturas para la calefacción en nuestro hogar:
- Temperatura durante el día: entre 20ºC y 21ºC.
- Temperatura durante la noche: entre 15ºC y 17ºC.
- Temperatura para bebés: entre 22ºC y 24ºC por el día y entre 18ºC y 20ºC por la noche.
- Si no estamos en casa: entre 15ºC y 17ºC.
No cubras tus radiadores
¿Eres de las personas que ponen el pijama, los calcetines o la manta en los radiadores de la calefacción para calentarlos antes de ponértelos? ¿Eres de los que utiliza los radiadores como secadora? (si es así, tenemos un post sobre cinco trucos para ahorrar al secar la ropa), Pues te diremos que estás provocando un consumo ineficiente de tu instalación de gas natural.
Cuando cubrimos los radiadores, lo único que conseguimos es que se obstruya la salida de calor, por lo que disminuirá la eficiencia y aumentará el consumo de gas.
Igualmente, es recomendable que tus radiadores no estén arrinconados por muebles o cortinas, ya que estos harán la misma función que cuando los cubrimos.
Aislamiento de la vivienda
Si quieres conseguir un consumo eficiente de gas natural en calefacción deberás tener en cuenta el aislamiento de tu vivienda. Un buen aislamiento puede hacernos ahorrar una gran cantidad de energía. Si la vivienda tiene puntos de entrada de aire, se enfriará con mayor facilidad y tenderás a subir la temperatura de la calefacción.
¿Cómo mejorar el aislamiento térmico?
- Ventanas: comprueba el aislamiento de tus ventanas. Las ventanas con doble acristalamiento son idóneas para el ahorro en calefacción.
- Paneles aislantes: pueden ser de diferentes materiales (celulosa, poliuretano, corcho, etc.) y sirven para aislar techos, paredes y suelos.
Comprueba los radiadores
Igual de importante es revisar el estado de tu caldera que el de tus radiadores. ¿Sabías que dentro de los radiadores se acumulan burbujas de aire? Estas burbujas ocupan el espacio del agua caliente, por lo que parecerá que la calefacción no irradia el calor que debería, y volvemos a subir la temperatura.
Para evitar estas burbujas que solo consiguen que gastemos más en gas con nuestra calefacción, es aconsejable que todos los años purguemos los radiadores para comprobar que no hay aire en su interior. Un truco para ahorrar en gas natural y que tan solo nos llevará unos segundos.
Puertas cerradas y cortinas abiertas
Estos son dos hábitos que deberías incluir en tu vida si quieres reducir el consumo de gas natural en tu hogar y con ello hacer un uso más eficiente y eficaz de tu calefacción.
Cierra las puertas de las diferentes estancias, de esta forma conseguirás conservar el calor de cada habitación e incluso podrás apagar antes la calefacción de esas zonas. Tener las puertas abiertas hará que el calor se “escape” y tardarás más en conseguir esa temperatura “confort”.
Otro truco es aprovechar al máximo las horas del sol. Aprovecha sus rayos para caldear tu casa, tan solo tendrás que subir las persianas y correr las cortinas para que entre todo el sol posible. En España tenemos la suerte de contar con una gran cantidad de horas de sol, ¡aprovechemoslas!
Recapitulando
Alcanzar un consumo eficiente del gas natural en nuestra calefacción es tan sencillo como seguir los pasos que te hemos contado. Revisar las instalaciones es esencial para que nuestro consumo sea eficiente y no desperdiciar energía. Además, como has leído, con unos pequeños trucos como purgar los radiadores o cerrar las puertas y ventanas correctamente podrás llegar ahorrar hasta un 7% de tu consumo habitual en gas y tener una casa más sostenible.
