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Una persona dependiente, ya sea por enfermedad, accidente, envejecimiento o con una incapacidad puede solicitar ayudas públicas tanto monetarias como de asistencia en función de su situación personal. En España se puso en marcha un marco legal para la atención y el cuidado de aquellos que lo requieren, además de prestaciones tanto para la persona dependiente como para los cuidadores. La ley de dependencia garantiza servicios y subvenciones para su bienestar diario, pero es frecuente dudar sobre la compatibilidad: ¿se puede trabajar cobrando la ley de dependencia? En este artículo te damos las claves.
Trabajar y cobrar la ley de dependencia
La Ley de dependencia categoriza a los beneficiarios según su grado de dependencia y en función de ello ofrece diferentes servicios y prestaciones. A partir de unos requisitos, se establecen las compatibilidades entre unas ayudas o atenciones y otras.
Es decir, si la persona requiere de asistencia en actividades básicas, si necesita un centro de día o asistencia durante algunas horas se establecerá en función del grado de dependencia y de la situación económica y personal en cada caso. De ahí que la compatibilidad entre servicios puede variar entre solicitantes.
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Sin embargo, cuando hablamos de compatibilizar el cobro de la prestación con un empleo, se entiende que aquellos que cuentan con un empleo, cuenten con más facilidades económicas y esto afectará a la cuantía de la prestación.
De hecho, según los Servicios Sociales, en la ley de dependencia se establece un baremos que determina la aportación económica que deberán efectuar los usuarios en función de sus ingresos, así los beneficiarios coparticipan en la financiación de los servicios que reciben en función de su capacidad económica.
La capacidad económica personal se determina en función a la renta y al patrimonio; se entiende por esto, salario, pensiones y prestaciones sociales, capital inmobiliario y mobiliario, rendimiento de actividades económicas y ganancias o pérdidas patrimoniales.
En el marco legal no hay ninguna norma o requisito que haga incompatible un empleo con la ley de dependencia pero la clave está en los requisitos. Para poder trabajar y cobrar la Ley de Dependencia es necesario cumplir con los requisitos de nacionalidad y residencia, cumplir con los criterios de dependencia establecidos por la normativa y no superar los límites de ingresos y patrimonio que marca la legislación. Pero las personas en situación de dependencia pueden acceder a esta prestación y conciliar su trabajo con el cuidado y la atención que necesitan.
Límites para compatibilizar trabajo y ayudas a la dependencia
La ley establece ciertas restricciones y condiciones a la hora de compatibilizar un empleo con las prestaciones o servicios ofrecidos para las personas dependientes. Se incluyen límites en cuanto a la jornada laboral, el nivel de ingresos y las necesidades en relación a las específicas de cada caso.
Es clave entender que cada caso es muy diferente entre sí y que más allá de los requisitos básicos hay casuísticas diversas, y del mismo modo, las concesiones serán distintas para cada persona.
Cada comunidad autónoma en España tiene su propio sistema para la gestión de la ley de dependencia, ya que esta competencia está descentralizada. Por lo tanto, cada región tendrá puntos de referencia o asistencia telemática.Te recomendamos que consultes en tu comunidad autónoma dónde y cómo puedes solicitar las ayudas a la dependencia.
En este ejemplo visual y esquemático puedes ver cómo funciona el servicio de ayudas a la dependencia, en función de la situación de cada solicitante, así como de los grados de dependencia.
*Fuente: Asociación de Residencias y Servicios de Atención a los Mayores de la Comunidad Valenciana, Lares. Una agrupación de entidades que ofrecen servicios geriátricos en las tres provincias. Datos de la Generalitat Valenciana.
El dependiente: compatibilidad de la prestación con un empleo
Para el dependiente compatibilizar un empleo con la prestación es posible, aunque debe tener en cuenta algunas cuestiones. En principio las prestaciones de dependencia son compatibles con el empleo para cualquier persona en situación de incapacidad, aunque hay que tener en cuenta que si existen ingresos varía la resolución puede variar.
También puede ocurrir que a consecuencia de su actividad profesional se realice una revisión del grado de dependencia y que esto pueda afectar a las prestaciones o al servicio percibido, pero siempre que no supere ciertos límites de ingresos, el dependiente podrá compatibilizar su salario con las ayudas.
El cuidador: compatibilidad con otro trabajo
La prestación económica que cobra el dependiente no está sujeta a las retribuciones del cuidador, solo se computan los ingresos propios del dependiente, ni tan siquiera de la unidad familiar.
Ahora bien, en el caso del cuidador puede haber limitaciones para compatibilizar otro empleo con los cuidados ya que se exigirá un horario acorde a las necesidades de la persona autenticidad. Es decir, que el otro empleo permita al cuidados cumplir en la atención al usuario sin ser un detrimento de la calidad de los servicios.
En cualquier caso, se recomienda comunicar la situación a los servicios sociales que gestionan la ley de dependencia para obtener la autorización, explicando los horarios de ese nuevo trabajo y como se piensa compatibilizar las funciones de cuidador y trabajador.
En resumen
Es posible trabajar y cobrar la ley de dependencia en España, siempre que se cumplan ciertos requisitos y condiciones establecidos por la normativa. La compatibilidad entre empleo y prestaciones depende del grado de dependencia, los ingresos del beneficiario y su situación personal.