Deterioro cognitivo en personas mayores

Con el paso de la edad, creemos que existe la tendencia natural a olvidarnos de ciertas cosas, estar más despistados que de normal, a ser más torpes, etc.. Pero, ¿y si te decimos que eso tiene un nombre y qué existen diferentes grados y maneras de combatirlo? Es cierto, hay un diagnóstico para este problema que afecta cada vez a más personas: deterioro cognitivo.

El deterioro cognitivo es un fenómeno que perjudica a millones de personas en todo el mundo y se ha convertido en un desafío creciente en el campo de la salud y la atención médica. Este término abarca una serie de trastornos que van desde la pérdida de memoria leve hasta la demencia severa, y su impacto se extiende mucho más allá de la persona que lo experimenta, afectando a sus familias, amigos y comunidades en general. En este artículo, explicaremos el concepto de deterioro cognitivo, sus causas, síntomas, y algunos tips para combatirlo. ¡Vamos allá!

Qué es el deterioro cognitivo y cómo identificarlo

Se puede definir el deterioro cognitivo como una alteración de las capacidades mentales y cognitivas de una persona, esta elevación es más elevada que la  alteración propia del envejecimiento. Algunas de las capacidades cognitivas que se ven afectadas son la memoria, la atención, incluso el lenguaje o el razonamiento, dependiendo de la fase de deterioro cognitivo en la que se encuentre. 

Grados del deterioro cognitivo

Según la situación de cada persona, se puede dividir el deterioro cognitivo en diferentes grados: 

• Deterioro cognitivo leve (DCL): Este grado es el primero de todos los tipos que hay. Principalmente se trata de pérdidas de memoria y/o de limitaciones cognitivas que no afectan en el desarrollo del día a día. Por ejemplo: olvidarnos de dónde hemos dejado algún objeto o de cosas que antes hacíamos de manera automatizada. 

• Deterioro cognitivo medio (demencia leve): Se da cuando algunas funcionalidades básicas empiezan a fallar, como la desorientación, pérdida de memoria sobre cosas más relevantes como fechas o acciones inmediatas. También se asocia con cambios de humor o episodios de ira sin justificación. 

• Deterioro cognitivo notable (demencia moderada): En estos casos, los síntomas van siendo más notables. Se va perdiendo la capacidad para comprender conceptos sencillos, la desorientación es más común aún y puede llegar a perder la percepción del entorno.

• Deterioro cognitivo avanzado o demencia grave: Ocurre cuando las pérdidas de memoria y la desorientación comienzan a limitar en las actividades cotidianas de la persona. A veces se olvida cómo vestirse, cuándo deben ir al baño o se muestran más nerviosos e irritables que de costumbre. Este grado de deterioro está relacionado con enfermedades como el Alzheimer. 

Tips para retrasar el deterioro cognitivo

Aunque la ciencia ha conseguido muchos avances en los últimos años, aún no se ha conseguido un tratamiento que cure o frene estas alteraciones. Sin embargo, se ha visto mejoras gracias a diferentes actividades y estilos de vida. A continuación os damos algunos tips que pueden ayudar a ralentizar el deterioro cognitivo y que puedes aplicar en tu vida diaria: 

Hacer ejercicio

El deporte ligero como puede ser la natación o la gimnasia hacen que el cuerpo se mantenga activo y en forma. Mantener la rutina y crear una nueva donde se incluya la actividad física ayudará a crear un hábito. Evitar el sedentarismo es fundamental.

Tener una mascota y sus beneficios

Se ha demostrado a través de diferentes estudios, como el realizado por el Centro Médico de la Universidad de Michigan, que las personas mayores con mascotas tenían un ritmo de deterioro cognitivo más lento que los que no tenían una. Esto quiere decir que tardaban más en verse afectados por el deterioro cognitivo. Esto se debe a que las mascotas reducen el estrés, te “obligan” a tener cierta actividad física diaria al sacarlas a pasear o cuidar de ellas y te hace relacionarte con otras personas. 

Actividad mental

Leer libros, el periódico o revistas a diario, estar pendiente de las noticias, hacer pasatiempos o jugar a juegos de mesa son pequeñas actividades que se pueden realizar en el día a día y que ralentizan el deterioro cognitivo de nuestros mayores. También visitar museos, ir al cine o a conciertos y demás actividades culturales son beneficiosas. El ajedrez es uno de esos deportes o juegos que son beneficiosos para la actividad mental y pueden ayudar a retrasar el deterioro cognitivo. 

Relaciones sociales

Al igual que ocurre con las actividades culturales y de ocio, las relaciones sociales son muy positivas a la hora de retrasar el deterioro cognitivo. Estar en contacto con otras personas, ya sea amigos, familiares o apuntarse a organizaciones, voluntariados, etc. son algunas de las cosas que nos mantendrán sanos durante más tiempo.

Dieta

La alimentación influye en una parte muy elevada en nuestro estado de ánimo, nuestra salud e incluso en nuestro envejecimiento.  Algunos famosos de avanzada edad han mencionado que tener una alimentación equilibrada y saludable es una parte fundamental de hacerse mayores y mantenerse jóvenes, como es el caso de la teoría de envejecimiento de Clint Eastwood. 

Conclusión 

El deterioro cognitivo es un desafío que afecta cada vez a más personas en todo el mundo, pero es importante entender que no es únicamente una consecuencia inevitable del envejecimiento. Existen diferentes grados de deterioro cognitivo, que van desde la demencia leve hasta la más grave, que afecta no solo a ellos sino también a sus familiares y seres queridos.

Sin embargo, la buena noticia es que existen estrategias para combatir el deterioro cognitivo y ralentizar su avance. Desde mantenerse activo físicamente hasta mantener las relaciones sociales y tener una dieta equilibrada, existen diferentes formas de cuidar nuestra salud cognitiva conforme nos hacemos mayores.