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En este viaje que llamamos vida, hay algo que todos compartimos: el misterio de lo que sucede después de nuestro último capítulo. Algunos de nosotros ya jubilados y otros aún tejiendo nuestro futuro profesional, nos enfrentamos a un dilema común: cómo organizar nuestras finanzas y construir un legado para nuestras familias del que estar orgullosos.
En este contexto nos surgen dudas como: ¿Cuándo es el momento adecuado para dejar de ahorrar? ¿Cuál es la herencia que quiero dejar a mis hijos y familiares? En este viaje de reflexión, nos enfrentamos al concepto provocador que tantos economistas han reflexionado: la herencia es un error de cálculo. Y a ti, ¿cuál es la herencia que te gustaría dejar a tus seres queridos?
Desde VidaCaixa te ayudamos con la planificación financiera para llegar a la jubilación con mayor previsión y, por supuesto, a ese último capítulo de la vida, desafiando el error de cálculo y asegurando un legado que va más allá de los números. ¿Empezamos?
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¿Qué dice la teoría del ciclo vital?
La teoría del ciclo vital desarrollada por Franco Modigliani en 1958, economista italiano galardonado con premio Nobel, está relacionada con el consumo y el ahorro de las personas. Aquí el economista expresa que se puede vivir de los ahorros, siempre y cuando se tengan.
Además, enfatiza un punto importante: la importancia del ahorro debido a que el ser humano está movido por el consumo. Como no sabemos cuándo nos vamos a morir, algunos ahorran hasta el final, sufren cuando dejan de ahorrar y, en consecuencia, generan herencias que aprovechan sus parientes. De aquí el origen de la frase «la herencia es un error de cálculo».
La premisa fundamental de la teoría del ciclo vital radica en la necesidad de que las personas, durante los períodos de mayores ingresos a lo largo de su vida, opten por acumular reservas destinadas a esos momentos en los que no tendrán entradas económicas.
¿Qué herencia te gustaría dejar a tus seres queridos?
De aquí podemos extraer varias reflexiones. Habrá quien podrá o preferirá que sus hijos hereden su patrimonio o negocio y habrá quienes se inclinen más por un legado en forma de valores, educación o la cultura de trabajo que les han enseñado a lo largo de su vida.
Para los que consideran herencia como sinónimo de patrimonio debemos tener en cuenta estos factores claves para que nuestros hijos hereden felizmente y no les suponga unos gastos extra demasiado descomunales. Hablamos del Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD), por el que el heredero de una sucesión o una donación debe pagar un tributo por recibirla y poder convertirse en titular.
Por otro lado, si una familia se decanta por el otro camino donde sus hijos trabajan y generan sus propios ahorros y patrimonio, el legado más importante es la educación financiera para que tengan sus propios instrumentos y la herencia no sea un error de cálculo, tal y como mencionaba Modigliani.
Pero, ¿por qué las herencias son errores de cálculo?
La teoría del ciclo vital examina la trayectoria financiera a lo largo de la existencia de una persona y la segmenta en tres fases: al inicio de su vida, donde no se experimentan ingresos; durante la etapa de maduración de la carrera profesional, que se trabaja y se obtienen recursos financieros; y finalmente, en la vejez, donde se vuelve a carecer de ingresos, a no ser que hayamos asegurado una jubilación tranquila mediante ahorros.
Modigliani ponía en valor que el ahorro no era más que un instrumento que aporta tranquilidad, ya que el hecho de gastar dinero supone una preocupación para muchas personas. Esto se debe a que no tenemos una fecha exacta de nuestra muerte y como consecuencia, hay personas que ahorran durante demasiado tiempo, hasta el final de sus días. Con esto generan herencias que aprovechan sus parientes, pero teniendo que pagar grandes cantidades de impuestos.
El economista argentino Claudio Zuchovicki se manifestó con la frase “Si te morís y te sobra dinero, hiciste mal las cuentas”. Aquí el error de cálculo no se refiere a que no se debe dejar legados y herencias a sus familiares, sino a la teoría de que el ahorro es un instrumento que sirve para aportar tranquilidad y garantizar el bienestar hasta el fin de nuestros días pero no debería quitarnos el momento de disfrutar de nuestro dinero con los nuestros.
Recapitulando.
¿Cuánto tienes pensado gastarte en tu jubilación?, ¿qué te gustaría dejar como legado o herencia a tus hijos? Estas son algunas de las preguntas que deberías hacerte y, en función de las respuestas, organizar tus cuentas y tu vida después de la jubilación. Para muchos, la mejor herencia será dejar un negocio o una vivienda y para otros será todas los viajes, valores y experiencias que hayan vivido juntos o que hayan podido aportar a sus hijos.
En definitiva, el objetivo es vivir una vida tranquila y que nuestros hijos cuenten con una buena herencia el día de mañana. Para ello, es necesario saber qué objetivos tenemos de cara a nuestra jubilación y gestionar nuestras finanzas de acorde a ellos. Te recomendamos crear instrumentos de ahorro como un plan de pensiones o un seguro de vida para vivir bien durante toda la vida, durante tu jubilación y para asegurar el bienestar de tus seres queridos.