La jubilación es un momento crucial en la vida de cualquier trabajador, pero para las personas con diversidad funcional puede haber ciertas consideraciones especiales a la hora de acceder a su retiro. La edad de jubilación ordinaria, que se fija a los 65 años, puede reducirse en el caso de las personas con discapacidad, y todo depende del tiempo de trabajo y del grado de discapacidad que la persona tenga. ¿Cuándo y cómo una persona con discapacidad del 33% puede jubilarse, qué requisitos debe cumplir y cuáles son las ventajas que se les ofrece? Te lo contamos en este post.
Jubilación anticipada con discapacidad del 33%
La integración laboral de las personas con discapacidad es un derecho para su acceso con igualdad de condiciones para el desarrollo de sus aptitudes. Del mismo modo, también tienen el mismo acceso a la pensión de jubilación sin penalización pero, aún así, en muchos casos tiene dificultades para alcanzar la cotización mínima para disfrutar de la pensión contributiva.
Por ello, la legislación avanza en este sentido para favorecer su integración en el mundo laboral, con incentivos para las empresas que contratan, pero también a través de incentivos fiscales para acceder antes de la edad ordinaria a la jubilación.
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En España se regula a través de dos Reales Decretos. El primero garantiza la jubilación anticipada para los trabajadores con al menos un 45% de discapacidad y permite que se jubilen a los 56 años, con 15 años cotizados. Y el segundo regula que, cualquier persona con discapacidad igual o superior al 65% podrá adelantar la jubilación 0,5 años por cada año cotizado pero no podrá producirse antes de los 52 años.
El Gobierno señala que las personas con una discapacidad del 33% no pueden adelantar su edad de jubilación, sino que podrán acceder a una jubilación anticipada ordinaria. Así, las personas que acrediten un grado de discapacidad de al menos el 33% y por debajo del 45% deben acceder a la jubilación en la edad ordinaria fijada en cada caso por norma general.
De esta manera, pueden acceder a diferentes ventajas y beneficios sociales. Sin embargo, no tienen derecho a la jubilación anticipada por discapacidad. Podrán acogerse a la jubilación anticipada igual que el resto de la población, cumpliendo con los requisitos que exige la Seguridad Social, que se han endurecido en los últimos tiempos.
Edad de jubilación con una discapacidad del 33%
En España las personas con discapacidad del 33% o superior pueden jubilarse a los 65 años como el resto de contribuyentes, por tanto, si alguien presenta una discapacidad del 33% o menos, no se podrá acoger a la normativa en materia de discapacidad laboral. Por tanto, tendrá que cumplir con los requisitos ordinarios para la jubilación anticipada, habiendo cotizado como mínimo 38 años.
En resumen: ¿Qué necesito para jubilarme con una discapacidad?
En función del grado de discapacidad tendrás unos requisitos u otros. Cualquier persona con discapacidad necesitará presentar el certificado de minusvalía para acreditar su situación, así como el grado de discapacidad.
¿Qué se necesita para jubilarse con una discapacidad? Presentar un informe médico donde se acredite la discapacidad, así como un certificado del Instituto de Mayores y Servicios Sociales o del órgano correspondiente de cada comunidad autónoma en el que se debe indicar la fecha en la que se ha detectado o manifestado la discapacidad.
Aquellas personas con una discapacidad del 33% o inferior deberán acceder a la jubilación por la vía ordinaria, por lo que tendrá que cumplir con los requisitos ordinarios para la jubilación anticipada, habiendo cotizado como mínimo 38 años.
