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Cuando hablamos de jubilación, pensamos en seguridad, en tranquilidad, en desahogo, ¿verdad? Es una época de la vida para la que no estamos dispuestos a asumir riesgos, y menos si hablamos de nuestros ahorros. A la hora de ahorrar para nuestro retiro, el riesgo a perder dinero no suele tener cabida.
Los planes de pensiones sin riesgo son la opción más evidente para los perfiles más conservadores que simplemente quieren ahorrar para el momento de su retiro y que antepongan la seguridad de su dinero a la rentabilidad de la inversión. En este post analizamos las opciones de planes de pensiones más seguros, ¿empezamos?
Planes de pensiones sin riesgo, ¿qué son?
Sin duda, a la hora de invertir en un plan de pensiones, la palabra riesgo está muy presente, tanto en las condiciones como en nuestra cabeza. Si tenemos un perfil más bien conservador, probablemente nos decantemos por valorar planes de pensiones sin riesgo, que son instrumentos de ahorro especialmente pensados para los clientes que quieran tener sus ahorros controlados e invertir de manera moderada y muy segura. Pero sobre todo, que quieran tener la completa certeza de que al rescatar su plan, recibirán la totalidad del dinero que han invertido.
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Que los ahorros de toda una vida corran peligro no es una opción para muchas personas, y si lo que buscamos es ahorrar e invertir de manera 100% segura, los planes de pensiones sin riesgo son la clave. Eso sí, sabiendo que el riesgo es mínimo o nulo, es importante saber que la rentabilidad irá acorde. Con lo cual, los planes de pensiones sin riesgo aseguran que el dinero aportado durante el tiempo que se tenga contratado se va a recuperar al 100%, pero las ganancias que nos aporte serán mínimas.
Existen distintos tipos de planes de pensiones, que pueden implicar más o menos riesgo y por tanto más o menos rentabilidad:
- Planes de pensiones garantizados.
- Planes de pensiones de renta fija.
- Planes de pensiones de renta fija mixta.
- Planes de pensiones de renta variable mixta.
- Planes de pensiones de renta variable.
Los instrumentos de ahorro menos arriesgados son, por tanto, los planes de pensiones garantizados y los planes de pensiones de renta fija.
Características de los planes de pensiones sin riesgo
Como hemos visto, los planes de pensiones garantizados son los planes que implican menos riesgo de perder el dinero invertido y garantizan, como su nombre indica, el rescate total del dinero ahorrado durante todos esos años.
Estos planes de pensiones tienen ciertas características que los diferencian de otros instrumentos de ahorro para la jubilación:
- La principal característica de los planes de pensiones garantizados es que la entidad depositaria, es decir, la institución o banco que guarda esos ahorros, garantiza la recuperación de la cantidad exacta de dinero que se haya depositado.
- Aunque el porcentaje de inversión es mínimo, como plan de pensiones que son, los planes garantizados pueden ser de renta fija, de renta variable o mixtos (se invierte en ambas).
- Para poder contratar un plan de pensiones garantizado es necesario firmar un compromiso de permanencia. Es decir, la garantía de recuperar el dinero invertido solo aplica si el asegurado mantiene el plan hasta su vencimiento. Si se rescata el producto antes de tiempo, se recupera a precio de mercado en ese momento.
Además, es necesario tener en cuenta que no se asegura la recuperación total del capital si se rescata el plan de pensiones por:
- Invalidez.
- Dependencia.
- Enfermedad grave.
- Muerte.
- Desempleo de larga duración.
- Desahucio de la vivienda habitual.
Por debajo de estos están los planes de pensiones de renta fija, que también entran dentro de los planes de pensiones sin riesgo o de riesgo mínimo. Estos productos de ahorro para la jubilación invierten el dinero ahorrado en activos de renta fija, por lo que el riesgo es mucho menor que si se invierte en renta variable, y en cambio, la rentabilidad también es mucho más baja. Son herramientas ideales para la inversión a medio-largo plazo, y suelen invertir en el mercado de deuda pública soberana.
Plan de pensiones sin riesgo, ¿cómo funciona?
Los planes de pensiones garantizados son los que menos riesgo presentan, pero ¿cómo funciona exactamente esto? Estos productos de ahorro, a diferencia del resto de planes de pensiones, no funcionan mediante aportaciones periódicas. Se realiza una aportación única en el momento de la contratación.
Eso sí, la tributación es la misma que para el resto de planes de pensiones, aunque con una pequeña distinción. Si en el momento de cobro del plan no se ha alcanzado la rentabilidad garantizada, el banco abonará la diferencia y ese plus no tributará como rentas del trabajo, sino como rendimiento del capital mobiliario.
Se puede efectuar el rescate de tres formas. En forma de capital, en un único pago en el momento del vencimiento, en forma de renta mensual, durante los meses que se hayan pactado previamente, o de forma mixta, cobrando una parte en el vencimiento y el resto en forma de renta.
Recapitulando
Ya lo hemos visto, los planes de pensiones sin riesgo engloban, principalmente, los planes garantizados y los planes de renta fija. Se trata de la opción ideal para los clientes de perfil más conservador que quieren ahorrar favoreciendo la seguridad y control de su inversión en todo momento. Se garantiza que, en el momento del vencimiento del plan, se recuperará la totalidad del dinero invertido. Eso sí, al contratar este tipo de plan de pensiones es necesario tener en cuenta que a menor riesgo, menor rentabilidad.